17 de Marzo, 2012
La suma de voluntades entre gobierno y sociedad permite
que grupos vulnerables ejerzan sus derechos y se escuchen sus demandas,
consideró la ONU durante la presentación del Informe sobre el Estado del
Voluntariado en el Mundo.
A pesar de que en el país existe un amplio
campo de oportunidades para el trabajo del voluntariado, es necesario trabajar
en su articulación para diversificar su campo de acción, consideró la
Organización de Naciones Unidas (ONU).
Tras reconocer que la labor del voluntariado en el mundo es indispensable para reducir la exclusión social, la marginación y la desigualdad, la ONU resaltó el trabajo que realiza en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Durante la presentación del Informe sobre el Estado del Voluntariado en el Mundo (IEVM), realizado por el organismo internacional, destacó que las acciones conjuntas de gobiernos y Organizaciones de la Sociedad Civil "logran que grupos como mujeres, jóvenes, personas de la tercera edad, con discapacidad, migrantes o enfermos de VIH-SIDA ejerzan sus derechos y hagan escuchar sus demandas", se señaló a través de un comunicado de prensa.
Susana Sottoli, directora de UNICEF, dijo que el voluntariado en México juega un papel clave, porque trabaja en muchos ámbitos, destacando la promoción de la participación social y de la sociedad civil.
De igual manera, la ONU reconoció el trabajo conjunto de la Sedesol con la sociedad civil.
Asimismo, el Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) y el Centro de Investigación y Estudios sobre Sociedad Civil (CIESC) presentaron el informe, que examina las contribuciones de los voluntarios en más de cien países al trabajar en temas como erradicación de la pobreza, salud, educación, medio ambiente, prevención de desastres, conflictos violentos, procesos de paz y derechos humanos, entre otros.
Durante el acto, estuvieron presentes el secretario de Desarrollo Social, Heriberto Félix Guerra, la titular del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), Ana María León Miravalles, quien señaló que el documento y sus recomendaciones "deben convertirse en una guía para generar un ambiente propicio en el que el voluntariado nacional florezca y alcance todo su potencial para cambiar los procesos de desarrollo, de democracia y de gobernanza".
Entre los puntos que destaca dicho informe estima que si el voluntariado fuera un país, sería el noveno más grande; las personas que realizan tareas de voluntariado son más proclives a considerarse felices, a sentirse más fuertes y llenas de energía; en el caso de las personas de edad, el voluntariado también deriva en estados de ánimo más positivos; reduce la ansiedad y las sensaciones de impotencia y desesperanza.
De igual manera, destaca que la participación voluntaria conduce a una buena salud mental, deriva en la reducción del estrés psicológico y atenúa sus consecuencias negativas, al tiempo que mejora la satisfacción vital, las ganas de vivir y la autoestima; además de que las personas que trabajan como voluntarios más horas y para más de una organización, experimentan un bienestar mayor.
hbc
Tras reconocer que la labor del voluntariado en el mundo es indispensable para reducir la exclusión social, la marginación y la desigualdad, la ONU resaltó el trabajo que realiza en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Durante la presentación del Informe sobre el Estado del Voluntariado en el Mundo (IEVM), realizado por el organismo internacional, destacó que las acciones conjuntas de gobiernos y Organizaciones de la Sociedad Civil "logran que grupos como mujeres, jóvenes, personas de la tercera edad, con discapacidad, migrantes o enfermos de VIH-SIDA ejerzan sus derechos y hagan escuchar sus demandas", se señaló a través de un comunicado de prensa.
Susana Sottoli, directora de UNICEF, dijo que el voluntariado en México juega un papel clave, porque trabaja en muchos ámbitos, destacando la promoción de la participación social y de la sociedad civil.
De igual manera, la ONU reconoció el trabajo conjunto de la Sedesol con la sociedad civil.
Asimismo, el Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) y el Centro de Investigación y Estudios sobre Sociedad Civil (CIESC) presentaron el informe, que examina las contribuciones de los voluntarios en más de cien países al trabajar en temas como erradicación de la pobreza, salud, educación, medio ambiente, prevención de desastres, conflictos violentos, procesos de paz y derechos humanos, entre otros.
Durante el acto, estuvieron presentes el secretario de Desarrollo Social, Heriberto Félix Guerra, la titular del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), Ana María León Miravalles, quien señaló que el documento y sus recomendaciones "deben convertirse en una guía para generar un ambiente propicio en el que el voluntariado nacional florezca y alcance todo su potencial para cambiar los procesos de desarrollo, de democracia y de gobernanza".
Entre los puntos que destaca dicho informe estima que si el voluntariado fuera un país, sería el noveno más grande; las personas que realizan tareas de voluntariado son más proclives a considerarse felices, a sentirse más fuertes y llenas de energía; en el caso de las personas de edad, el voluntariado también deriva en estados de ánimo más positivos; reduce la ansiedad y las sensaciones de impotencia y desesperanza.
De igual manera, destaca que la participación voluntaria conduce a una buena salud mental, deriva en la reducción del estrés psicológico y atenúa sus consecuencias negativas, al tiempo que mejora la satisfacción vital, las ganas de vivir y la autoestima; además de que las personas que trabajan como voluntarios más horas y para más de una organización, experimentan un bienestar mayor.
hbc
